¿Por qué comemos?
Nos alimentamos porque el cuerpo necesita nutrientes para funcionar de la cabeza a los pies. Lo que ingerimos se procesa en el organismo y mantiene las funciones indispensables para pensar, subir al colectivo, trabajar, hacer actividad física y divertirse.
La manera en que nos alimentos va más allá de la necesidad biológica, ES CULTURAL.
El hábito alimentario está determinado por factores culturales, sociales, afectivos y geográficos. Por eso, la conducta alimentaria refleja una suma de condicionantes de la cual NO somos completamente conscientes.
Dos pilares para comer bien:
- Entender los alimentos: qué nutrientes los componen, cuáles son necesarios y cuáles no aportan nada bueno.
- Prever lo que vamos a comer: tener a mano los alimentos (verdura y fruta de todo tipo, carne con poca grasa, cereales integrales, etc.).
¿Se puede modificar una conducta alimentaria alterada o desordenada?
La respuesta es contundente: SÍ. El camino a seguir depende de lo que cada persona necesite modificar. Para esto no hay otra forma que consultar con especialistas en rehabilitación de trastornos de la conducta alimentaria.