¿Qué papel juega la familia en el tratamiento de trastornos alimentarios?

¿Es necesario que se involucre? ¿Puede ayudar?

La participación de la familia es necesaria y forma parte del proceso de tratamiento y recuperación de pacientes con anorexia, bulimia, obesidad y otros trastornos de la conducta alimentaria (TCA).

Las principales razones:

  • Organización: muchas veces l@s pacientes con TCA necesitan delegar durante cierto tiempo, la cocción y administración de los alimentos.
    ¿Por qué? Como son personas que no logran sostener una alimentación sana, controlada y equilibrada, requieren que el entorno familiar asuma la gestión de los alimentos durante la primera etapa de tratamiento. Por eso, es muy importante que se involucren.
  • Cultura familiar: suele haber situaciones o costumbres que favorecen, sostienen y aumentan las posibilidades de generar y mantener un TCA. Esos aspectos que facilitan conductas inadecuadas y que no ayudan a la recuperación, es necesario trabajarlos y modificarlos en el grupo familiar.
  • Dinámica de los vínculos: la relaciones familiares profundas, cuestiones vinculares inconscientes y, otras veces no tanto, suelen ser el origen o disparador para que aparezca y se sostenga un TCA.  Dinámicas disfuncionales como sobreprotección, violencia, incomunicación, exclusión, abandono, entre otras, son situaciones que requieren tratamiento especializado para lograr progresos afianzados y sostenibles en el tiempo.

Siempre lo expresamos y ahora insistimos en que la recuperación de personas con trastornos alimentarios, consiste en un tratamiento interdisciplinario, con estrategias complejas. Una parte de ese proceso es el trabajo con la familia.

Y todavía más: así mejoran las condiciones de quienes están en tratamiento, pero también, los vínculos familiares.

¡Sanas oportunidades para tod@s!

 

Generamos cambios junto a l@s pacientes